Las Raíces de la Inseguridad (1)&#8232

NOTAS DE GRACIA

Una de las bases importantes para una vida cristiana sana es la seguridad de tu salvación. Es casi imposible tener a Cristo como el centro de tu vida si no estás seguro de que Él está en tu vida permanentemente como tu Salvador personal (Juan 1:12).

Muchos creyentes que luchan con la incertidumbre respecto a su posición con Dios podrían avanzar a la seguridad si pudiesen discernir las causas de su inseguridad. Vamos a considerar algunos factores comunes que pueden obstaculizar el sentido de seguridad de un creyente.

1. Sensación de que no es salvo.

A veces la naturaleza de la inseguridad del creyente es más una cuestión emocional que una cuestión doctrinal o espiritual. En otras palabras, hay una diferencia entre la sensación de no ser salvo, y el dudar de las promesas de Dios en lo que concierne a la redención.

Por ejemplo, cuando una persona crece en una atmósfera de aceptación basada en el desempeño de sus funciones o el rechazo evidente, esto causa daño emocional en la infancia. A pesar de que el amor de los padres debe ser una expresión y un símbolo del amor del Padre Celestial y Su fidelidad, el amor de la familia es a menudo insuficiente o no se expresa de manera significativa.

Por lo tanto, cuando una persona que ha sido rechazada desde la infancia nace de nuevo por la fe en Cristo, él o ella pueden carecer de la confirmación emocional de ser verdaderamente aceptado por el Padre esencial – Dios.

En una sesión de conserjería, el Dr. Carlos Salomón encontró una misionera veterana que había venido en busca de ayuda porque ella sufría de una crónica falta de confianza. Esta hermana tenía un evidente testimonio cristiano, un buen conocimiento de las promesas de las Escrituras, había llevado a muchos a Cristo, y estimaba las doctrinas de la gracia. A la luz de sus antecedentes y los patrones de rechazos durante su infancia, Salomón la retó a considerar que en realidad no tenía dudas de su salvación, sino que simplemente sentía que no había sido salva. Cuando ella pudo separar el componente emocional de su condición espiritual, fue capaz de entender y, finalmente, resolver esta incertidumbre.

El apóstol Juan afirma: “pues si nuestro corazón nos reprende, mayor que nuestro corazón es Dios, y él sabe todas las cosas. Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios;” (1 Juan 3:20,21).

La curación emocional se logra al experimentar el amor divino y humano y la aceptación a través del tiempo. La garantía de Dios a Su profeta se aplica a cada uno de Sus hijos: “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.” (Jeremías 31: 3).

La fe bíblica no se basa en sentimientos – ya sean positivos o negativos – por lo que debemos reconocer la posibilidad de la resistencia emocional de sentirnos salvados. A pesar de las emociones engañosas, el creyente puede tener la confianza de que la salvación en Cristo se ha recibido y que será guardada por Dios. La seguridad de Pablo se elevó por encima de las circunstancias y las distracciones: “Por lo cual asimismo padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.” (2 Timoteo 1:12).


Derechos de Autor de NOTAS DE GRACIA de John B. Woodward, 2010. Se concede permiso para reimprimir (con crédito) para uso no comercial. Citas de la Biblia fueron tomadas de la versión RVR 1960 © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina. Traducción de J A Toranzo.

Posted in